Portugal se puso adelante 2-0 rápidamente ante Luxemburgo por las Eliminatorias Europeas y todo gracias a la eficacia y jerarquía del Bicho desde el punto blanco del penal.
Al minuto 8 tras la torpe infracción sobre Bernardo Silva en el área, se hizo cargo de la pena máxima y con un potente derechazo al centro engaño por completo al arquero rival. Y solo cuatro minutos después el portero lo bajo en el área y amplió la ventaja, a pesar de que debió repetir el cobro por invasión del área.
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