El Brest era más que el PSG y merecía el empate, pero en un contragolpe relampagueante iniciado con el puñetazo de Navas, Ángel Di María condujo hasta campo rival, abrió para Hakimi que de primera le metió una asistencia deliciosa y el argentino definió para el 4-2 final, de manera idéntica a la final contra Brasil de la Copa América en el mítico Maracaná.
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