El mediocampista Andros Townsend sin lugar a dudas convirtió uno de los mejores goles del año en la sorpresiva victoria del Crystal Palace 3-2 ante el Manchester City en el Etihad Stadium.
Desde casi 30 metros, el mediocampista tomó con una magistral volea de zurda un rechazo y clavo la esférica en el ángulo superior izquierda de la portería que defendía Ederson. Imposible para cualquier arquero.