Antes del duelo ante Sevilla, el Atlético de Madrid había comunicado que sería el partido de despedida de Luis Suárez en el Wanda Metropolitano ya que después de dos temporadas, siendo fundamental para el histórico título de La Liga 2020/2021 marcando 21 goles, termina su contrato en junio y no renovará con la institución.
El uruguayo arrancó de titular y a pesar de no haber podido marcar en el empate 1-1, cuando fue sustituido a los 65′ por Matheus Cunha, mientras se retiraba del campo de juego fue despedido con una impresionante ovación de pie de parte de toda la afición colchonera presente en el estadio.
El Pistolero agradeció visiblemente emocionado y cuando se sentó en el banquillo de suplentes no pudo contener las lágrimas. Al darse cuenta que una cámara lo estaba filmando, se tapó la cara con una toalla.
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