Una tendencia que marca pauta en las principales redes sociales: Instagram, Twitter, Facebook y finalmente en Telegram, son los Tipster de las apuestas deportivas. El pronosticador o Tipster es un especialista que pronostica las apuestas deportivas que puedes realizar en un link como este, en cuya plataforma consigues recomendaciones y consejos sin tener que pagar por los consejos.
Este pronosticador se encarga de recomendar determinadas apuestas a sus seguidores en redes sociales. Recomienda las que considera que son rentables a corto o largo plazo. Su “modus operandi” lo implementa a cambio de un pago periódico y constante, mediante una suscripción en su cuenta de Telegram. Casi nunca es gratuito. Pero algunas de las inquietudes que causa polémica son:
¿Son efectivos los Tipster?
¿Un Tipster es un truco o es una estafa?
¿Sirven las redes para promocionar la actividad del Tipster a sus clientes potenciales?
¿Son los Tipster los causantes de la adicción de los jóvenes a las apuestas deportivas?
Ya es usual ver en Instagam un influecer o celebridad de las redes sociales, que publica mensajes como este:
“Queréis ganar dinero fácil y rápido. Este mes he conseguido 200 euros y nada, solo tenéis que hacer ‘swipe up’ en esta ‘storie’ para más información»
Han llegado al punto que un ex concursante de un exitoso Reality Show de parejas de una cadena privada de televisión de España, transmitió un mensaje como este, estimulando a los jóvenes a seguir sus apuestas. Sicólogos aseguran que es una apología y una motivación a la Ludopatía.
Otros aseguran que empresas inescrupulosas dedicadas al sector de los juegos de casino online se encuentran “detrás de bastidores” en esta situación. Entonces los jugadores deben ser más cautelosos a la hora de seleccionar su casino online. La responsabilidad y la ética de la empresa o del operador, es entonces (según este criterio), tan importante como la variedad de juegos o los protocolos de seguridad y encriptado del jugador.
La opinión de un especialista en la materia
Según David Pere Martínez, psicólogo social:
«El fenómeno de las comunidades apostadoras es global. La estructura formal es extremadamente similar en todos los países, con pocas diferencias. La comunidad apostadora desarrolla su actividad en el espacio virtual. Cualquier persona con una simple conexión a Internet, sin importar el lugar de residencia, puede participar de ella. Sus integrantes emplean diferentes páginas web de diversa naturaleza, desde webs de estadísticas a, como es obvio, las de las casas de apuestas. Las redes sociales son el hábitat de la comunidad apostadora»
Pere Martínez es responsable de investigación en ‘Episteme. Investigación e Intervención social’ y autor del libro “Ludomorfina: El fenómeno de las apuestas deportivas en la juventud española”. El psicólogo también es coordinador de la Unidad de Políticas de Drogas de la Universidad Autónoma de Barcelona, profesor colaborador en la Universidad Oberta de Catalunya y antropólogo en el Medical Antropología Research Center de la Universidad Rovira i Virgili.
¿Qué relación hay entre los Tipsters y las casas de apuestas?
Los tipsters comparten sus pronósticos por dinero y sus ganancias (aseguran algunos) están relacionadas con los programas de afiliación que ofrecen los casinos online o las casas de apuestas deportivas. Existen dos maneras de participación en los programas de afiliados: el “revenue share” o ganancias compartidas y el coste por acción o CPA.
En el CPA las casa de apuestan pagan al tipster según los clientes que atraigan. Según palabras de David Pere Martínez:
«Algunas empresas, concretamente las españolas y las que poseen menos cuota de mercado, pagan una cantidad en función del número de nuevos clientes que se dan de alta. Desde 10 euros por persona, si captan entre una y diez personas, o hasta los 50 euros si convencen a más de veinte que se registren en los juegos de casino. Las líderes del sector pagan el precio fijo de 10 euros por nueva alta, sin importar el número total de clientes»
En el “revenue share” el casino online o la casa de apuestas deportivas otorgan un porcentaje de las pérdidas netas que tuvo el cliente que capto el tipster. Algunos cobran una especie de hibrido de estas 2 formas de cobro, dependiendo de sus necesidades, su status y su capacidad para captar clientes.
La polémica sigue servida.